Hoy en día no es difícil ver un estudio de grabación en una casa particular, hay muchísimos productores, tanto noveles como profesionales, que usan una habitación de su casa, un trastero, una buhardilla o un rincón abandonado, para montar un home studio. Por eso vamos a explicar como montar tu propio home studio de una forma sencilla y dando distintas opciones económicas.
Aquí vamos a darte unas pequeñas bases para poder montar tu home studio con un presupuesto acorde a tus necesidades o tus limitaciones, ya que, aunque a todos nos gustaría tener un estudio de miles de euros, sabemos que eso no siempre puede ser así.
Habitación acondicionada
Lo primero es tener una habitación donde poder montarlo todo, a ser posible que no molestes a los vecinos, pero también que los vecinos no te molesten a ti.
Además, esta habitación debe ser lo más neutra posible, acústicamente hablando, que no resalte ni oculte o enmascare ninguna frecuencia, y conseguir que lo que escuchas de los altavoces, se parezca lo más posible a lo que está grabado.
Tampoco hay que volverse loco con el acondicionamiento de la sala, que no es lo mismo que la insonorización y hay mucha gente que lo confunde, si vais a poner placas de acondicionamiento, no las pongáis a ojo donde quede bonito porque no vais a conseguir nada, mas de un estudio hemos visto con placas moradas con forma de rombo y picos como pirámides puestos detrás de los altavoces sin sentido ninguno.
Si realmente quereis acondicionar la acústica de vuestro estudio con trampas de ruido, preguntar a un experto, pero la idea de montar un estudio económico descartadla.
Ordenador
Como home estudio se entiende algo básico y económico, y en este caso, lo más económico es centralizar el máximo número de componentes dentro de un ordenador.
Los componentes que podemos tener en un ordenador es el grabador multipistas y los efectos (ecualizadores, compresores, reverbs, flangers, etc).
A mayor capacidad de proceso, más efectos podremos utilizar a la vez. A mayor cantidad de memoria Ram, mayor puede ser el proyecto.
Si es posible, haz una partición extra e instala un sistema operativo de uso exclusivo para música, sin conexión a internet, y donde sólo instalarás los programas que estrictamente vayas a usar.
No vamos a entrar en la guerra de Mac o Pc, eso ya va en gustos, pero a día de hoy si que se esta usando mas un portátil conectado a una pantalla que un ordenador de sobre mesa de toda la vida, así, si viajas, llevaras contigo todos tus proyectos y podrás crear nuevos si necesidad de tener dos ordenadores.
Tarjeta de sonido
Para conectar el ordenador con los altavoces, necesitarás una tarjeta de sonido.
Hay muchos tipos distintos de tarjetas de sonido, en función de cómo se conectan al ordenador (USB, Firewire, internas…) y en función de las características y funciones que ofrecen.
Si solo vas a hacer música, no te interesa que tengan 16 entradas de micrófono por ejemplo, pero si que los previos y la calidad de conversión sea de calidad, luego pondremos varios ejemplos de configuraciones según características y precios.
En cuanto a Tarjetas de Sonido Económicas :
Focusrite Scarlett 2i2
Tascam US 2×2
En cuanto a Tarjetas de Sonido Semi Profesionales :
Universal Audio Apollo Twin Solo
En cuanto a Tarjetas de Sonido Profesionales :
Universal Audio Apollo 8 Quad
Apogee 16 Shimpohony
Programas o Software
Ya sea para grabar, editar, mezclar, producir, secuenciar, arreglar, etc., el material con el que se esté trabajando hace falta gestionarlo de alguna forma. Hay programas sencillos de edición de audio SoundForge o Audacity, y programas mas completos y profesionales como Logic Pro, Cubase, Ableton, Studio One, Fl Studio, Protools etc…
El mundo de los secuenciadores es muy amplio y hay opiniones para todo, así que elige el que creas que es mas sencillo e intuitivo para ti, y si puede ser, que no sea pirata ya que vas a tener problemas con las actualizaciones y el día menos pensado te quedas sin proyectos.
Monitores o altavoces
Para poder escuchar lo que ocurre dentro del ordenador, necesitaremos unos altavoces, también llamados monitores.
Los monitores pueden ser activos (si son auto-amplificados) o pasivos (si necesitan amplificación externa) aunque los pasivos siempre han coloreado un poco mas que los activos.
Los monitores deben tener una respuesta de frecuencia lo más plana posible dentro del margen de frecuencias que escucha el oído humano, que se estima entre 20 herzios y 20.000 herzios, aunque varía con la edad.
Con esto tendrías un home-estudio básico, con el que podrás secuenciar, producir música con instrumentos virtuales o mezclar.
Si además quieres grabar fuentes de sonido, como voces o algún otro instrumento, necesitarás algo más.
También hay que tener en cuenta el tamaño de estudio, la distancia a la que pondrás tus monitores de ti, la altura etc. Los estudios mas profesionales suelen tener dos o tres parejas de monitores, con diferentes tamaños, para tener respuesta en campo cercano y campo medio, pero no es absolutamente necesario ya que para la mezcla final también puedes usar unos auriculares de estudio que luego veremos.
Aparte hay que tener en cuenta de que todo debe ir mas o menos acorde, no puedes tener una tarjeta de sonido de 2.000€ y unos monitores de 300€ la pareja, es como ponerle a un Ferrari las ruedas de un 600.
En cuanto a Monitores de Estudio Económicos :
KRK RP5 G3 Black
En cuanto a Monitores de Estudio Semi Profesionales :
Focal Alpha 65
En cuanto a Monitores de Estudio Profesionales :
Eve Audio SC 308
Micrófono
Los micrófonos sirven para convertir la señal acústica en señal eléctrica, pero solo son necesarios si vas a grabar voces o instrumentos, puedes tener un micrófono de calidad media/alta si por ejemplo grabas un podcast con tus sesiones, programa de radio o alguna vocal para un tema, si vas a tener cantantes en tu estudio te recomendamos algo de gama mas alta ya que el patrón de captura no es igual para hablar que para cantar.
Micrófonos económicos
AKG Perception 120
Audio Technica AT2020
Micrófonos Semi Profesionales
Audio Technica AT2050
Rode NT2A
Cable
Aunque parezca una tontería, los cables con los que se conectan los distintos aparatos de audio juegan un papel importante, y deben ser de calidad. Un cable de mala calidad puede meter ruido, o ser más propenso a recoger campos magnéticos que se transforman en ruido.